A partir del próximo 1 de mayo, las pedreras ubicadas en Nuevo León incrementarán el precio por tonelada de sus productos entre un 30 y un 40 por ciento. Este aumento, según indicó Roberto Macías, presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción de Nuevo León (CMIC), reflejará un alza del 15 por ciento en los materiales y tendrá un impacto significativo en el sector de la construcción.
Macías señaló que este ajuste en los precios afectará tanto a las obras ya contratadas en los sectores público y privado como a las metas establecidas. Este fenómeno, que se ha observado desde 2023, ha generado un incremento en el costo de las viviendas. Según datos de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), el precio de las casas en la entidad aumentó hasta un 11.3 por ciento en 2023 en comparación con el año anterior.
El presidente de la CMIC también destacó que el aumento en el costo de la arena y la grava conllevará un incremento en otros productos como el block, el concreto y la carpeta asfáltica. Este panorama plantea desafíos para el sector de la construcción, que deberá ajustarse a los nuevos precios y reevaluar sus presupuestos y metas en respuesta a estos cambios.